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El objetivo general de FUSILLI es apoyar a las ciudades paneuropeas participantes (y sus zonas periurbanas) con el fin de abordar mediante una sólida cooperación para el intercambio de conocimientos y el aprendizaje mutuo los retos de la transformación del sistema alimentario.
El objetivo principal es construir un plan alimentario urbano para alcanzar una transición holística integrada y segura hacia sistemas alimentarios saludables, sostenibles, seguros, inclusivos, equitativos y rentables, a través de políticas urbanas innovadoras viables y replicables que lleven a desplegar acciones de mejora en todas las etapas de la cadena de valor alimentaria en línea con las cuatro prioridades políticas de FOOD 2030 (Nutrición para dietas sostenibles y saludables; Sistemas alimentarios climáticamente inteligentes y ambientalmente sostenibles; Circularidad y sistemas alimentarios eficientes en recursos; e Innovación y empoderamiento de las comunidades).
FUSILLI sigue así un enfoque multiobjetivo de aplicación de políticas urbanas innovadoras viables y reproducibles, que conduzcan a la mejora de las actuaciones en todas las fases de la cadena de valor alimentaria, en consonancia con las cuatro prioridades de la política FOOD2030 de la UE
El proyecto FUSILLI está estructurado en diferentes paquetes de trabajo:
En cada ciudad del proyecto creará o mejorará el desarrollo de un laboratorio viviente, que es un ecosistema de innovación abierta donde se desplegarán acciones concretas para desarrollar e implementar políticas de sistemas alimentarios urbanos que cumplan las cuatro prioridades de FOOD 2030. Estos laboratorios vivientes tienen como objetivo resolver con la implementación de diferentes acciones innovadoras a través de todas las etapas de la cadena alimentaria: producción y procesamiento, distribución y logística, consumo, pérdida y desperdicio de alimentos, y gobernanza. Los laboratorios vivientes implicarán a varias partes interesadas que representen a todos los actores del sistema alimentario a nivel local: contarán al menos con una autoridad pública, un socio industrial (PYME o asociación), una asociación de consumidores y educación.
El proyecto es dirigido por el Centro Tecnológico CARTIF, el proyecto reúne a 14 socios de 9 países de Europa y África que trabajan con pequeñas explotaciones agrícolas de todo el mundo.
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